Cuando empezamos en dDialoGa (un lustro largo ha pasado ya) la limitación de recursos habituales en los comienzos de una aventura empresarial y nuestros propios principios éticos nos llevaron a utilizar nuestros propios teléfonos personales en el trabajo diario de la cooperativa. Al fin y al cabo una de las cosas que enseñamos en nuestros cursos de brecha digital es que entre las recomendaciones de uso sostenible de los dispositivos está el alargar la vida de los dispositivos y usar solo los necesarios para reducir de esta manera el impacto ambiental.
Sin embargo con el tiempo nos hemos dado cuenta de que esta decisión (que no lo era tanto porque nos venía un poco impuesta por razones pecuniarias) iba en contra de otro de nuestros principios. Y es que veíamos como el trabajo en muchos casos invadía nuestras vidas privadas y que compartir cuentas y perfiles privados y de empresa generaban problemas.
Somos Conexión
Así que hace ya un tiempo decidimos que la empresa podía permitirse contratar una línea de empresa, aprovechando un cambio de dispositivo de uno de los socios.
Uno de los compromisos de nuestra cooperativa como partes de las redes de Economía Social y Solidaria es al menos valorar siempre la alternativa dentro de dichas redes a la hora de seleccionar proveedores o al menor alternativas éticas. En uno de los mercados sociales de Aragón que se celebró en el Luis Buñuel conocimos la cooperativa Somos Conexión, que ofrecía servicios de líneas de móvil y decidimos que esta primera línea de empresa como tal la contrataríamos con ellos.
En el tiempo que llevamos siendo clientes de Somos Conexión siempre hemos recibido una perfecta atención al cliente y muy pocas incidencias. La línea de empresa no necesita mucho consumo de datos y Somos Conexión nos ofrecía la posibilidad de ajustarlo a nuestras necesidades, de hecho en más de una ocasión la propia cooperativa ha reducido nuestra tarifas ante el consumo real de datos y minutos (un detallazo). Aunque el gasto en datos no parezca tener una incidencia tan directa en cosas como el cambio climático como el transporte o la energía, lo cierto es que sí la tiene y aquí podéis ver el porque.
Sin embargo, la llegada de la pandemia, con sus confinamientos y teletrabajos; y el crecimiento en clientes y diferentes perfiles, redes y webs a gestionar, hacían que no fuese práctico tener una única línea de empresa, que nos turnábamos, así que hemos tenido que dotar de líneas de empresa a cada socio. Como estábamos muy contentos con Somos Conexión, hemos contratado las dos nuevas líneas con esta cooperativa y además hemos aprovechado para cumplir uno de los deseos que teníamos desde hace mucho tiempo: probar un Fairphone del que nos habían llegado informaciones de que podría ser ese «móvil ético».
El Fairphone
Cuando muy al principio de funcionamiento de la cooperativa buscábamos proveedores y equipos informáticos, etc. dedicamos mucho tiempo a buscar alternativas – sino dentro de las redes de economía social y solidaria (este tipo de industria es uno de los debes en esta búsqueda de generar otro tipo de economía) , al menos más sostenibles – una de las pocas cosas que encontramos es esta empresa holandesa que fabricaba móviles con el menor impacto social y ecológico posible. Con materias primas procedentes de zonas que no estén en conflicto, que garantizan los derechos laborales de los empleados, que fabrican móviles modulares para poder reparar piezas y reducir el impacto ambiental de la fabricación de móviles completos…
Sin embargo en aquellos momentos conseguir un Fairphone no era cosa sencilla: tenían un precio muy por encima de otros dispositivos de su gama y además hacía falta entrar en una lista de espera de varios meses hasta que te llegaba el móvil. Así que lo dejamos para otro momento, que ha llegado ahora.
El móvil funciona como otros que hemos tenido, con Android y de momento no hemos tenido problemas con ninguna aplicación ni función. Uno de los detalles que anunciaban (y se cumple) es que el móvil llega sin un cargador, entiende el fabricante que ya tenemos en cualquier casa decenas de cargadores de equipos antiguos y es una de sus apuestas por reducir el impacto. Además en el embalaje viene incluido un pequeño destornillador que sirve para desmontar alguno de los módulos sustituibles, junto con un folleto de instrucciones en el que te indica cómo proceder (recomiendan ponerse en contacto con ellos antes para descartar problemas de software).
Aprendizajes
1.- Reducir el gasto en dispositivos es importante, pero mantener espacio personal y profesional separados en el sector de la comunicación es necesario para cuidarnos.
2.- Las cooperativas que ofrecen servicios alternativos a los del mercado tradicional son fiables, éticos y saber que hay personas detrás nos da confianza.
3.- Es posible fabricar dispositivos tecnológicos de otra manera, pero queda aún mucho camino en ese ámbito (ordenadores, impresoras, etc…).
Seguiremos colaborando en la mejora de proyectos grandes y pequeños, tanto desde la difusión de iniciativas como desde la gestión directa, probando sistemas éticos de gestión y consumo ¿y tú? ¿Necesitas apoyo técnico? ¿Te queda alguna otra duda? No te preocupes, en el blog de dDialoGa iremos aportando consejos, ideas, herramientas y acciones que nos lleven a mejorar la comunicación, financiación y estrategia de nuestros proyectos.