Voz y Participación Ciudadana

Con motivo de la cercanía de las fechas de votación de los Presupuestos Participativos de Zaragoza, hemos colaborado con el  Centro Comunitario de Oliver, dependiente de la Fundación Adunare, dando una charla a sus usuarios sobre “Voz y Participación Ciudadana” y organizando dos sesiones de formación para ayudarles a participar en este novedoso proceso.

Haciendo un recorrido histórico sobre de las formas de participación, desde las elecciones, el asociacionismo y la movilización, a las instituciones de atención al ciudadano y hasta llegar a las nuevas iniciativas de participación abiertas desde las distintas instituciones para centrarnos, específicamente, en los Presupuestos Participativos del Ayuntamiento de Zaragoza.

Al acto acudió un grupo mayoritariamente femenino formado sobre todo por personas mayores, todos usuarios del Centro en alguno de los grupos de actividades que forman parte de la oferta del Comunitario.

dDialoGa en Comunitario Oliver

Debido a cuestiones organizativas, la charla se programó para el 8 de marzo coincidiendo con el acto convocado por múltiples entidades del Barrio Oliver para sumarse a la convocatoria nacional “Nosotras Paramos”. Por este motivo el acto se abrió recordando la celebración de este día y destacando como en muchos espacios de participación, como esa misma charla en la que las mujeres eran mayoría, la aportación de estas es importantísima.

Comenzamos la presentación señalando, que, tratándose de una charla sobre Participación Ciudadana, queríamos que los participantes aportasen su visión y hubiese debate. Mientras avanzábamos en el repaso a las diferentes formas de participación, muchas de las mujeres aportaron su experiencia en las luchas vecinales y por los derechos durante el franquismo y después añadiendo, además, la sensación de que en los últimos años era todo mucho más difícil y los políticos ya no atendían tanto a la ciudadanía.

Al llegar a la parte en la que explicábamos las nuevas vías de participación, las consultas ciudadanas o los procesos participativos, todo el mundo coincidía en que no se podía perder la costumbre de participar en los ámbitos más cercanos, asociándonos, juntándonos para celebraciones, como la reciente Cincomarzada, coincidiendo con otras personas, evitando la individualización, para que participar no se convierta en algo que cada uno hace en su casa en su ordenador.

Al final hicimos también un breve repaso sobre el proceso participativo a través del cual se hizo el reparto de los fondos de la Junta Municipal Oliver-Valdefierro para actividades de distrito, cuya devolución de resultados tenía lugar al día siguiente.

Las conclusiones a las que podemos llegar es que hay demanda de participación, pero procesos centrados en las nuevas herramientas de Internet todavía resultan inaccesibles a cierta parte de la población por su complejidad técnica, por lo que está pendiente hacer un esfuerzo para incorporarles y poner en valor y revitalizar los espacios de participación tradicionales.

Hola! ¿dDialoGamos?